Arte del "Rifacimento"

Fue preferentemente en el Renacimiento cuando el arte de rehacer las obras maestras de los antiguos tuvo especial importancia. La originalidad, tal como la imaginamos en nuestro mundo de lo novedoso, no tenía el prestigio ni la exigencia que le otorgamos.

Por eso se tuvo como indispensable para el artista practicar la técnica del "Rifacimento", o el rehacer lo ya perfectamente hecho. 

La imitación, la alusión, las variaciones sobre un tema, la cita son otras formas de reconocer que toda obra de arte se sostiene no tanto en la observación que el artista hace de sí mismo y de la realidad, como en las obras de arte que más le han impactado, por exactas.

Si en el arte es posible y hasta recomendable el rehacer lo hecho, también lo es en la cultura popular. Permítaseme, entonces, ofrecer el siguiente rifacimento de una copla grotescamente acertada que se remonta a los años cuando en los atrios de las catedrales europeas se representaba una y otra vez, con insidiosa insistencia, "La Danza de la Muerte". 

Llamemos a esta versión actual de dicha copla jocosa: "La danza de la mentira":

                                En este mundo de infamia
                                de mentir nadie se escapa
                                miente el rico, miente el rey,
                                miente el obispo y el Papa.