Lo mismo de lo mismo de nuevo: el escritor lacrimoso
Sé que me repito. Que escribo lo mismo de manera más o menos igual una y otra vez.
Mis archivos electrónicos son un desorden de textos repetidos, algunos publicados y vueltos a publicar, otros queriendo que los publique,que los publique, que los publique,aunque no los lea nadie.
Son un derrame de palabras, una inundación: estero desbordado, río, aguas salidas de madre, aluvión. Vena rota, chorro, borbotón obscuro y aún peor: vómito, desagüe, canaleta, albañal, cloaca, acequia de aguas negras.
Quién quiere saber de tal calamidad de aguas servidas y sus remolinos.
Las he canalizado y encaminado a los remansos. Y aunque nadie ha de beber las aguas que van a lo escusado, más de alguien habrá leído algunos de mis chorros en el estanque quieto de la página impresa o la pantalla. (Inexcusable mezcolanza de imágenes--observa el corrector, a quien no le hago caso--que a lo mejor alguien entiende).
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